Así funcionaba la Biblioteca Juan Bautista Alberdi de Laguna Paiva en 1933
NOTA de la FOTO: La foto de la fachada de la Biblioteca presente un error en su publicación original, esta impresa en lo que sedenomina "espejo" y las letras que dicen el nombre y la fecha de fundación estan "tachadas". Se desconoce el motivo de esto pero aclaramos el detalle.
Boleto al pasado, para saber lo que fuimos y mejorar lo que somos...
Pequeños recortes de diarios, olvidados en el tiempo y el espacio son rescatados del fondo de nuestra historia y nos refrescan la memoria de este pueblo y de su gente...
Y nos vemos sumergidos en un viaje imaginario al pasado, al tiempo que nos contaron los abuelos, a momentos claves que hicieron crecer al pueblo... en este caso ligado a nuestro acervo cultural y a la casa donde se gestaron ideas llenas de futuro.
Arrancaba el año 1933, Laguna Paiva, pueblo ferroviario, cuna de obreros del riel crecía a buen ritmo y los diarios capitalinos reflejaban esos momentos gracias al trabajo de sus corresponsales en el interior de la provincia de Santa Fe. El 01 de Enero de ese año, Diario El Orden describe los progresos de una institución cultural, la Biblioteca Juan B. Alberdi, repasa su reciente fundación, nombra su comisión directiva y da detalles de asociados y libros con los que contaba la Biblioteca. Se plantea un reclamo a la Comuna local de aquellos años.
Página completa, cinco fotografías ilustrativas (en una de ellas está Luciano Riquelme Atienza) y un texto imperdible coronan este documento histórico que gracias a las nuevas tecnologías podemos rescatar para compartirlo con todos ustedes. Transcribimos el texto para una mejor lectura. Disfruten de este pequeño viaje al corazón de la historia de Laguna Paiva amigos navegantes.
Leandro J. Hilari - administrador/webmaster
EL ORDEN - 01 de Enero de 1933
INFORMACIONES DE NUESTROS CORRESPONSALES
Los progresos de una institución cultural de Laguna Paiva
Diversas notas gráficas tomadas especialmente por este diario sobre motivos relacionados con la Biblioteca Popular Juan Bautista Alberdi, de Laguna Paiva Arriba: local de la prestigiosa institución, costeado con los aportes de los asociados y la espontánea contribución de los vecinos y de otras entidades culturales, y el amplio salón de lectura, muy concurrido a toda hora del día. Abajo: El presidente de la institución señor L. Riquelme Atienza y nuestro corresponsal señor Pablo Gianessilli. El vicepresidente de la Biblioteca y varios miembros de la C.D. Y, por último, la sala de ajedrez, anexa a la Biblioteca, con varios de sus asiduos y entusiastas concurrentes.
Es sorprendente la evolución que han experimentado algunos pueblos de nuestra provincia en sus múltiples manifestaciones.
Laguna Paiva, centro de actividad obrera, ha conquistado en el transcurso de breves años una situación culminante, no solo por la densidad de su población, la importancia de su comercio y su extensión edilicia, sino también por la preponderancia de sus instituciones culturales, entre las que se destaca la Biblioteca Popular Juan Bautista Alberdi. Esta prestigiosa entidad, fundada hace apenas cinco años por el distinguido galeno Dr. Eduardo Tessaire (hijo), que presidió y propulsó con tesonera fe e inteligencia sus primeros pasos, constituye el eje de todas las inquietudes espirituales de Laguna Paiva. El doctor Tessaire, durante los períodos consecutivos, fue el alma entusiasta de las primeras conquistas. Puso en el logro de éstas, el calor y la energía de su carácter, de tal manera, que cuando entregó la Biblioteca a sus sucesores, la obra ya estaba en marcha firme. Su nombre se recuerda con cariño y reconocimiento de gratitud amplia en la institución.
La presidencia del ingeniero Pedro Bernardini, que sucedió al fundador, se caracterizó, más que nada por ordenar la situación económica de la biblioteca con propósitos de construir un salón de lectura proyectado. Luego, asumió la dirección el señor Francisco Guerra, espíritu dinámico, de actividad envidiable, que supo polarizarla eficazmente en la juventud, logrando no solo triplicar el número de los asociados, sino también realizar la obra anhelada de un cómodo y amplio edificio, hoy orgullo del pueblo. Su gestión se considera como un bello ejemplo para los planes y propósitos de trabajo de los sucesores.
Por el período de 1931-1932 se eligió presidente al señor L. Riquelme Atienza, reelegido nuevamente por un nuevo año. El señor Riquelme Atienza, por medio de conferencias, festivales artísticos y otros actos que han tenido la mejor acogida popular, ha logrado intensificar la obra de sus antecesores.
La Biblioteca Juan Bautista Alberdi, ha tenido, en consecuencia, valiosos gestores. Cada uno de ellos le ha consagrado su cariño, su tesón y alma. Puede así explicarse, en consecuencia que este centro de cultura, sea en la actualidad, uno de los mejor organizados de los existentes en los pueblos de la provincia.
Cuenta actualmente con más de cuatrocientos asociados, con un movimiento cotidiano de 50 a 60 libros. Recibe los principales diarios de la provincia y del país y posee más de cinco mil volúmenes y más de quinientos folletos.
Funciona anexo a la Biblioteca un salón de ajedrez, que se ve diariamente muy concurrido. La juventud aliena de esta manera la gimnasia intelectual que proporciona la buena lectura, con la que ofrece el tablero del matemático y noble juego que sirviera al genio guerrero de Francia para resolver los problemas que imponían sus futuras batallas.
El principal benefactor de la biblioteca ha sido, en todo momento, desde su fundación, el prestigioso centro filodramático “Florencio Sanchez”, institución ésta que también representa en la vida social de Laguna Paiva, un valor cultural de notables relieves.
El comercio, la industria, los gremios, los mismos hogares, directa o indirectamente, han colaborado también en la gran obra de la biblioteca. Y en esta cooperación valiosa y colectiva, solo resalta un ingrato contraste: la Comuna. Este organismo, que aunque surgió de un lamentable error popular, debiera traducir con sus actos las aspiraciones y conciencia del agregado social, sólo se nos ha revelado como un lastre pesado de nuestro progreso cultural. En efecto, lejos de concurrir por todos los medios a su alcance al engrandecimiento de la institución que nos ocupa, cometió la torpe, infeliz y repudiable hazaña de dejar sin efecto una modesta subvención comunal que aún los facinerosos de un pueblo centro africano hubieran respetado. Un temperamento igual o semejante, no ha tenido precedente ni entre los cafres.
Nos sorprendió sin embargo el “reajuste económico” de estos ediles de pacotilla. Hoy como en todos los tiempos y en todos los puntos de la bola terráquea; existen estos ejemplares adversos a toda obra de progreso espiritual. Son muchos los búhos o felinos que huyen de la luz, y a veces sufren de tal acentuada y alarmante fotofobia, que es necesario matarlos, o meterles la jeringa de la lógica para que se curen o revienten estrepitosamente.
Nadie lamenta la quita que se ha efectuado a los recursos de la Biblioteca; pero lo que nadie disculpará jamás, es la intención obtusa que ha predominado en la medida, el insulto avieso que se ha hecho a la sociedad de Laguna Paiva, que tiene por la entidad de referencia un justificado orgullo. Bien dicen que ciertos manjares no se han hecho para el paladar de los rumiantes.
No obstante éstas injustificables medidas de los que desgobiernan con su ineptitud los intereses del pueblo, la biblioteca seguirá su ruta de progreso conquistando cada día nuevos aportes. Están sus destinos en buenas manos, y eso es suficiente garantía.
Constituyen su actual C. D. las siguientes personas: Presidente, Sr. D. Riquelme Atienza; Vice Sr. Miguel Alvarez; Secretario Sr. Pedro Miranda; Prosecretario Sr. Francisco Cerra; Tesorero Sr. Emilio Tort; Pro Sr. Antonio Díaz; Vocales, Sres. Sandalio Farto, Hipólito Jiménez, Alfonso Díaz, B. Villani y E. Zavioli.-